Ciudad de México.- La banda de Gitanos extorsionadores que dio muerte al patriarca de la comunidad gitana en México, Pablo Luvinoff Arroniz, continua azorando a los miembros de este clan, a quienes exigen cantidades que varían entre 10 y 12 millones de pesos para evitar ser secuestrados o asesinados, según consta una denuncia presentada ayer en la Procuraduría General de la República (PGR).
Según los representantes legales de este grupo, la extorsiones radican principalmente en el Estado de México, donde los criminales identificados como Martín Herrera Álvarez y Abraham Kuri Manzur "El Calea", en ultimas fechas ha vuelto hacer de las suyas, al exigir fuertes cuotas sin que las autoridades les pongan un alto a su carrera delictiva.
"Los asustados gitanos han tenido que abandonar sus casas y refugiarse en hoteles para no ser secuestrados o ultimados por los sicarios y bandidos que los tiene amenazados con violar a sus mujeres e hijos sino cumplen sus exigencias", señalaron los abogados de la comunidad gitana, tras presentar la querella por delincuencia organizada en contra de estos.
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