El sueño europeo de un continente sin fronteras, apareció muerto ayer por la noche. La mayoría de los países de la UE votaron a favor de volver a imponer los controles de pasaportes entre los países – en respuesta a los temores de que sería inundado por refugiados de las revoluciones en el mundo árabe De los 22 países de la UE que operan actualmente el Acuerdo de Schengen,15 dijeron que estarían a favor de su desaparición en una reunión de ministros de Interior en Bruselas. El tratado, firmado en 1985 , ha creado un espacio europeo sin fronteras interiores, que abarca más de 400 millones de personas en la mayoría de los países de la UE, así como otras cuatro países fuera del bloque – Suiza, Liechtenstein, Noruega e Islandia.
En una reunión celebrada en Bruselas el miércoles, los ministros de Interior acordaron una «revisión radical” de Schengen. Y también acordaron luchar contra la inmigración presionando para ‘acuerdos de readmisión “con países de Oriente Medio y África del Norte para enviar a casa a los refugiados.
El cambio de política fue impulsada por Francia e Italia, dos miembros de la UE básicos, que han soportado el peso de la afluencia hasta el momento. La banda suiza de personas de derecha del Partido (SVP) incluso ha insinuado hacia una retirada del Tratado de Schengen. La medida es una chispa de caos en los viajes para cualquier persona tratando de pasar hacia o a través de Suiza en el camino de Italia a Francia y Alemania, o viceversa. Sólo cuatro países que se oponen al desguace del acuerdo.
Dinamarca ha decidido unilateralmente reintegrar sus fronteras con Suecia y Alemania.Decenas de miles de inmigrantes han llegado a Italia desde Túnez después de la revolución a principios de este año .La mayoría de ellos querían llegar a Francia, o tal vez más allá
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